El autor indaga en el pasado, en la historia, para ir descubriendo las raíces de esas vías que ha desarrollado el ser humano, en las distintas civilizaciones y culturas, para el acceso a una educación plena, como vía de acceso a la humanización tanto de los seres humanos como de las sociedades de las que forma parte. Pero no se conforma con ello el autor, sino que tiende puentes del pasado al presente y aun al futuro, basándose en unos conocimientos de aportaciones multidisciplinares del presente, tanto en los ámbitos científicos como humanísticos, para proporcionar una guía al educador de hoy, orientándolo sobre cuál ha de ser su labor, que no es otra que la de enseñar a aprender y, también. enseñar a vivir.