Bañada por el mar Caribe, la isla de Puerto Rico, elegida por el portal USA Today Travel como la mejor isla del Caribe, ofrece al viajero un pequeño y manejable territorio en cuya visita se conjugan naturaleza, historia y el singular carácter y ritmo propio de todas las islas caribeñas, pero en este caso con la singularidad que le confiere un estilo de vida idéntico en muchos aspectos al de Estados Unidos, país del que Puerto Rico es Estado Libre Asociado.
El casco histórico del Viejo San Juan invita a perderse entre sus coloridos edificios coloniales, calles y plazas luminosas, fortalezas que miran el océano, y una animada y peculiar vida nocturna donde la salsa adereza los tragos de ron. En el otro extrema de la isla, la ciudad de Ponce es otra invitación a detenerse y disfrutar de su arquitectura y su alegría. Y entre una cosa y otra, pequeños pueblos que siguen manteniendo el encanto del periodo colonial y su Sierra Central con su Ruta Panorámica.
El viajero será tentado igualmente por la exuberante naturaleza con su frondoso bosque tropical del Yunque, las bahías bioluminiscentes y sus playas de arena blanca bordeadas de cocoteros, ideales para disfrutar del sereno Caribe y con varias zonas que son un verdadero paraíso para surfistas.
Disfrutar de Puerto Rico es especialmente fácil para el visitante hispanohablante, que dispone de la comodidad de conocer la lengua y que siempre es bien recibido, con mucho cariño y efusión y con referencias constantes a ese idioma común que en Puerto Rico rivaliza con el inglés y se mezcla con el mismo dando lugar al a veces desconcertante spanglish.