Seguro que fuiste objeto de conflictos e injusticias en tu colegio, o por lo menos fuiste testigo de ellos. Sabes que el uso de la violencia no resuelve nada; solo hace daño, provoca resentimiento y deseo de venganza. Pues yo te digo que la no violencia es tan poderosa como un arma. Si me enfrento a un hombre que durante mucho tiempo me ha perseguido y humillado cruelmente y le digo: ?Pégame, si quieres; no me lo merezco, pero lo acepto, todos sabrán que yo tengo razón y tú no?, esta será un arma justa y poderosa que tengo en este instante.