La antropóloga forense Temperance Brennan de Carolina del Norte y Quebec ha llegado a Montreal desde
Charlotte, durante los fríos días de diciembre, para declarar como testigo experta en un juicio por asesinato. Debería
repasar sus notas, pero en lugar de eso está cavando en el sótano -plagado de ratas- de una pizzería donde han
aparecido los esqueletos de tres mujeres jóvenes. ¿Cuándo murieron? ¿Cómo llegaron hasta allí? El inspector de
homicidios, Luc Claudel, cree que se trata de huesos antiguos. El dueño de la pizzería, que encontró botones del siglo
XIX junto a los esqueletos, está convencido de ello. Pero hay algo que no tiene sentido. Tempe analiza los huesos y las
dentaduras en su laboratorio y descubre la procedencia de las mujeres. Si estuviera en lo cierto, Claudel tiene tres
asesinatos recientes en sus manos. El detective Andrew Ryan, mientras tanto, actúa de forma misteriosa. ¿Por qué esas
llamadas telefónicas privadas y su aparente distanciamiento de Brennan? Tempe intenta encontrar respuestas a sus
problemas personales y a las investigaciones al tiempo que se ve inmersa en un endemoniado caso del que probablemente
no pueda escapar. Aquellas mujeres desaparecieron y nunca volvieron, ella podría ser la siguiente&