¿Cuál es el precio del afecto y en qué moneda hay que pagarlo? ¿Qué pesa más, una caricia o el haber tenido que vaciarnos para conseguirla? A la larga, es inevitable descubrir que algunas monedas pesan mucho más de lo que nos han dado a cambio de ellas. Perder en el cambio y acostumbrarse a esa pérdida es la lección que Martina Iranco, la protagonista de esta novela, aprende desde la infancia. Esta novela valiente habla de nuestra urgencia vital por conseguir el afecto, de cómo aprendemos a ganarlo; habla de la piel como lugar en el que se escribe el propio desarraigo, de darse cuenta al fin de que jugar a esconderse es un forma de vivir con las manos vacías.
«Una de las mejores muestras de erotismo que he leído» (José María Pozuelo Yvancos, ABC).
«Hermosamente perverso, transgresivo e inteligente» (L'Hebdo).