Elegimos a nuestra pareja, somos responsables de la relación, pero vivir en pareja no es fácil ni garantiza
nada. Se trata de una aventura con muchos caminos posibles y una oportunidad de crecer que apela a la libertad y a la
responsabilidad. Juntos pero no atados propone construir un espacio de relación donde cada persona pueda continuar
siendo ella misma al tiempo que trabaja para conseguir un espacio de pareja compartido. Para ello, los autores revisan
el concepto del amor y plantean la importancia del misterio, el territorio, sus límites y fronteras, la fidelidad y la
gestión de las crisis a la hora de construir una relación emocionalmente ecológica, creativa y vinculada por el amor en
lugar de la dependencia.