Destruida casi por completo durante la Segunda Guerra Mundial, el ?Muro de la vergüenza? la dejó dividida en dos durante casi tres décadas. Pero a comienzos de los noventa, Berlín resurgió de sus cenizas hasta ser lo que es hoy: la ciudad más cosmopolita de Europa. No le hacen falta palacios espectaculares o templos antiguos; mirar de frente la Puerta de Brandemburgo resulta sobrecogedor. Berlín sorprende por sus amplias avenidas -como la mítica Unten der Linden-, magníficas plazas, en su mayoría en la vanguardia del diseño arquitectónico, grandes extensiones de zonas verdes y sus más de 150 museos, entre los mejores del mundo. En las últimas décadas, destacados artistas de todo el mundo han venido hasta aquí para impregnarse de las últimas tendencias en todos los campos de la cultura. Berlín es una capital pujante en cuanto a música, arte, moda y diseño moderno. Aquí, el visitante disfrutará de una de las zonas comerciales y de ocio más grandes del mundo. Resulta obligada la visita a algunas cervecerías y cafés para disfrutar de su gastronomía en la que los dulces ocupan un lugar preeminente. La amabilidad y educación de los berlineses sin duda será el complemento perfecto a una visita inolvidable.