Con sus palacios imperiales, sus paisajes urbanos barrocos, sus Kaffeehäuser (cafés) iluminados por candelabros y sus Beisln (bistró-pubs) revestidos en madera, Viena está colmada de historia. Pero además la ciudad sigue incorporando todo lo nuevo: desde el diseño, la arquitectura y el arte contemporáneo hasta las iniciativas ecológicas y las innovaciones culinarias. Por eso Viena suele encabezar los rankings internacionales sobre calidad de vida. Desde luego, el pasado de Viena vive en su presente, y por extensión, en su futuro.