Medio millón de gitanos europeos fueron exterminados por el régimen nazi; muchos más fueron sometidos a una política de discriminación racial similar a la sufrida por el pueblo judío. Sin embargo, la persecución y el tormento de los gitanos en la Europa de Hitler tiene poca presencia en los libros de historia. La tendencia a ignorar el genocidio romaní refleja la pervivencia de un antigitanismo cotidiano que estuvo en la base del racismo extremo del nazismo. Es por ello urgente conocer la historia del holocausto gitano. Este libro la sitúa en el contexto de la violencia generalizada de la Segunda Guerra Mundial al tiempo que ofrece una explicación que la inscribe en una trayectoria más amplia de persecución antigitana en las sociedades modernas. Esta es una historia marcada por la separación y destrucción de familias, la esterilización de adultos y niños, la expoliación de bienes y privación de medios de vida, el trabajo esclavo, los experimentos médicos, el horror de los campos de exterminio y el asesinato en masa, todo ello por el hecho de ser gitanos. Frente a la negación del reconocimiento