Leonora Christina, condesa de Ulfeldt, hija del monarca Cristián IV de Dinamarca, estuvo encarcelada durante veintidós años, acusada de alta traición por conocer los planes conspiratorios de su marido Corfitz Ulfeldt contra el sucesor al trono, el rey Federico III. Durante este tiempo, encerrada en la llamada Torre Azul del castillo de Copenhague, cuyas celdas tenían nombres muy evocadores, como la Iglesia Oscura y la Celda de las Brujas, Leonora se dedicó a escribir el relato de sus infortunios y desventuras, desde la niñez hasta la puesta en libertad.
Publicado por primera vez en 1869, dos siglos después de su redacción, y traducido a diferentes idiomas, Memorias tristes de la Torre Azul se ha convertido en un texto de referencia de la literatura danesa del siglo XVII. No es solo la historia real de una mujer encarcelada por amor a su marido, sino un relato con toques literarios sobre complots de palacio y conspiraciones, lleno de personajes retratados a veces de manera exageradamente ambigua y misteriosa, que parecen fruto de la mejor ficción de intriga.