Este libro conecta la historia del Ateneo de San Sebastián, y luego Guipuzcoano, con la historia de la ciudad a través del siglo y medio de su existencia. El enfoque es básicamente cultural pero también ofrece un recorrido por los acontecimientos que marcaron la ciudad desde su condición siempre de enclave liberal, que lo mismo sufrió el asedio del integrismo carlista durante la Segunda Guerra al finalizar el s. XIX, que conoció el ensañamiento del integrismo totalitario al finalizar el s. XX. Como no podía ser menos, el Ateneo vivió en sus carnes las diferentes peripecias ideológicas y estuvo desaparecido por lo menos dos veces, en 1882 y en 1936, como consecuencia de la cerrazón ultraderechista. En otras ocasiones interrumpió sus actividades por diversos motivos, si bien renació continuamente de sus cenizas, de modo que se puede sostener sin ningún género de dudas que el Ateneo actual es el legítimo heredero del creado en 1870 por un grupo de donostiarras emprendedores. A lo largo de una existencia tan dilatada aunque principalmente nómada -nunca tuvo sede propia- ha ido dejando por el camino jirones enteros de vida (a veces se los arrebataron, como cuando las tropas franquistas ocuparon Donostia) y se pueden contar con los dedos de una mano los documentos que han subsistido del periodo 1870-1936. La notoriedad e importancia del Ateneo en la vida cultural de la ciudad eran tales en aquellos tiempos que la prensa recogía y reseñaba todas y cada una de sus actividades, lo que ha permitido reconstruir el itinerario de la entidad. Para el período que va desde 1944 a nuestros días se ha podido utilizar la documentación conservada. La historia del Ateneo, en definitiva, se ofrece como un espejo al ciudadano donostiarra.