Durante mucho tiempo a María Zambrano le precedió la fama de escritora más que de filósofa. Su obra, repleta de metáforas y simbolismos, fue difícil de encuadrar dentro del academicismo. Sin embargo ella se supo siempre filósofa y, desde edad muy temprana, cuando siendo una adolescente le preguntaban ¿por qué iba a estudiar Filosofía?, respondía de inmediato «no poder dejar de hacerlo», dejando claro su tendencia al pensamiento. Este libro reclama el carácter filosófico del pensamiento de María Zambrano a través de seis palabras clave: método, naufragio, delirio, memoria, luz y poesía. Términos que las autoras eligieron para acercar su legado filosófico de forma fluida e inteligible al mayor público posible. Su reivindicación de una razón poética no puede caer en tierra baldía en estos tiempos de orfandad y desconcierto en los que tanto necesitamos desarrollar una imaginación social que nos ayude a construir un mundo más justo y humano.