El "Diccionario Filosófico" de Voltaire, seudónimo del escritor, filósofo e historiador François-Marie Arouet (1694-1778), fue pensado como una especie de máquina de guerra en contra de “la Infamia”. Fue una de las últimas obras escritas y publicadas por Voltaire y se presenta con la estructura de un diccionario, ordenado alfabéticamente, de manera que el lector puede bucear en sus páginas e ir leyendo según le parezca. Partiendo por la entrada “Abad” y finalizando con “Zoroastro” cada una de las entradas consta de una explicación más o menos extensa del término y está planteada con tonos que van de la ironía a lo sarcástico. A pesar del gran escándalo que supuso, tuvo un gran éxito, tanto que se realizaron diversas reediciones durante la década de 1760, en cada una de ellas, Voltaire revisaba y actualizaba las diferentes entradas, pasando así, de tener 73 artículos en la primera edición a 118 e la edición de 1769. A medida que se iban sucediendo las modificaciones, también iba creciendo el tono anticristiano en las entradas, tanto en las nuevas como en las ya existentes, que iban adoptando cada vez un tono más duro y sarcástico, dejando atrás el tono de ironía agradable y bromista.