Se reconstruye aquí la biografía de Ashé desde su primera infancia hasta el presente narrativo, desde la voz cimbreante y persuasiva de este entrañable personaje. La travesía de Ashé, que físicamente enlaza San Miguel de Pallaques con Barcelona, camina sobre los rieles, por un lado del desasimiento afectivo de su niñez y la búsqueda permanente de compensación, que lo impulsa a la desbocada y sensualizada exploración amorosa, y por otro de la incólume y conmovedora pasión por el fútbol: desde pequeño asombró, en todo tipo de escenarios, por ser un zurdo especialmente dotado para la magia y el gol. La experiencia vivida por Ashé tiene el sello agitado, en ocasiones cruel, del migrante; primero hacia la capital peruana y luego hasta Barcelona, en cuyo curso es visible la ausencia de estabilidad emocional que, de manera permanente, lo remite a ese estadio henchido de dificultades y carencias materiales, finalmente pródigo en contrapesos afectivos, que es su infancia y adolescencia en su terruño.