Es una evidencia que los seres humanos, una vez tenemos satisfechas nuestras necesidades básicas, queremos realizar aquello que nos apasiona, no hacer lo que nos disgusta, y rodearnos de las personas que nos hacen sentir bien, amando y siendo amados. No obstante, es evidente que algo no funciona cuando la felicidad se nos escapa con tanta facilidad y acaba siendo algo tan sumamente volátil.
La buena noticia es que está en nuestras manos tomar las riendas de nuestra vida. Para ello es necesaria una propuesta firme y de pleno convencimiento; un propósito claro y definido para conseguir vivir en plenitud, salud y prosperidad. ¿Te atreves a escogerte?
El paradigma del corazón es una invitación para que te abras a nuevas perspectivas y dimensiones más allá de lo que has aprendido y experimentado hasta ahora, donde escogerse significa poner la mente al servicio del corazón para vivir en armonía, sanar y mejorar todas tus relaciones y vivir en paz, amor, ternura, alegría y sentido del humor.
¡Hoy es un gran día para empezar!