Cuando se practica con respeto a los demás y a uno mismo, el masaje favorece el equilibrio del cuerpo, del alma y del espíritu, pudiendo corresponder a tres tipos de sensibilidad: sensorial, sensual y sexual. El primero significa un espíritu abierto y una buena actitud interior y su motivación es la ternura; el segundo provoca una gran euforia; y el tercero conduce al placer erótico. El doctor Jacques Baugé-Prévost, autor de varios libros famosos de medicina natural, explica en esta obra las diferentes técnicas de masaje, y más concretamente, las particularidades del drenaje linfático manual. Su enfoque es al mismo tiempo preventivo y curativo, resaltando la mejora del tono neuromuscular y de la sensibilidad táctil, así como la búsqueda -a través del masaje- del florecimiento de la naturaleza tridimensional del ser. El libro se completa con un breve diccionario de naturosexología.